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\u00bfQu\u00e9 es un parque arqueol\u00f3gico?<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
No existe una definici\u00f3n est\u00e1ndar de lo que constituye un parque arqueol\u00f3gico, a contraste con lo que es un museo cultural cuya funci\u00f3n y misi\u00f3n de coleccionar, conservar, estudiar, interpretar y presentar al p\u00fablico sus colecciones, ha sido definido y aceptado internacionalmente. Al respecto, existe una discusi\u00f3n entre expertos. Nos referimos a un ensayo program\u00e1tico de Paulette McManus (1999) quien destaca los siguientes aspectos de parques arqueol\u00f3gicos:<\/p>\n\n\n\n
Se trata de un recurso cultural, de acceso para el p\u00fablico en general, sin fines de lucro, con el objetivo de proteger y mantener un sitio arqueol\u00f3gico emblem\u00e1tico con caracter\u00edsticas culturales importantes. Cuenta con l\u00edmites claramente establecidos, una administraci\u00f3n eficaz que toma en cuenta criterios de la conservaci\u00f3n del monumento y las necesidades de los visitantes quienes requieren cierta infraestructura como se\u00f1alizaci\u00f3n, senderos, etc. El proyecto del parque arqueol\u00f3gico implica la participaci\u00f3n de diferentes grupos de personas e instituciones interesadas, como los pobladores locales, el gobierno regional y\/o nacional, investigadores de diferentes disciplinas (arque\u00f3logos profesionales, conservadores, bi\u00f3logos, etc. con sus instituciones cient\u00edficas) y agencias de turismo. P. McManus tambi\u00e9n pone \u00e9nfasis en la relaci\u00f3n del monumento arqueol\u00f3gico con un paisaje determinado.<\/p>\n\n\n\n
Es este \u00faltimo aspecto que tiene especial relevancia en los parques arqueol\u00f3gicos con arte rupestre, ya que se trata de ejemplos de paisajes naturales y culturales. De esta manera, los sitios de arte rupestre protegidos en un parque arqueol\u00f3gico presentan a la vez restos culturales en un entorno natural espec\u00edfico, ambos aspectos impresionantes para los visitantes. Sabemos en el nivel internacional que los turistas de sitios de arte rupestre en gran parte se interesan m\u00e1s en el medio ambiente que en las manifestaciones culturales.<\/p>\n\n\n\n
Parques arqueol\u00f3gicos con arte rupestre pueden contribuir sustancialmente al desarrollo sostenible de una regi\u00f3n, como muestran los ejemplos de Valcamonica (Italia), C\u00f4a (Portugal) y Serra de Capivara (Brasil), donde no solamente se preservan los grabados o pinturas rupestres en sus sitios originales y los paisajes naturales y culturales, sino tambi\u00e9n existen centros de interpretaci\u00f3n con actividades educativas y una estrecha relaci\u00f3n con actividades comerciales como, por ejemplo, la venta de artesan\u00eda con im\u00e1genes del arte rupestre.<\/p>\n\n\n\n
Por otra parte, debemos incidir en la necesidad de generar una pol\u00edtica nacional para la conservaci\u00f3n del arte rupestre y la consiguiente creaci\u00f3n, gesti\u00f3n y administraci\u00f3n de parques arqueol\u00f3gicos nacionales o regionales, ya que no todos los sitios pueden recibir visitantes (acceso, estado de conservaci\u00f3n etc.); ejemplos de Australia donde en el parque Nacional Kakad\u00fa (norte de Australia), de m\u00e1s de 5.000 sitios con arte rupestre solo 3 se abrieron al p\u00fablico (Bednarik1995), o en M\u00e9xico donde se han establecido cuatro categor\u00edas y que se los puede sintetizar en: sitios abiertos a todo p\u00fablico, sitios restringidos para todo p\u00fablico y abiertos para investigadores, sitios cerrados solo con la posibilidad de acceso a los administradores y especialistas, deber\u00edan ser tomados en cuenta (Taboada y Strecker 1996).<\/p>\n\n\n\n
En esta secci\u00f3n presentamos algunos parques con arte rupestre en Bolivia que no cumplen con los requisitos mencionados arriba. Se trata de intentos de preservar sitios patrimoniales que deben considerarse provisionales, en algunos casos muy mal logrados, sin un plan de manejo y la debida administraci\u00f3n con la participaci\u00f3n de expertos y de los pobladores locales. La SIARB ha intervenido como entidad consultora en una cantidad de proyectos, en algunos casos nos involucramos como responsables de la planificaci\u00f3n de un parque y las obras iniciales. Sin embargo, en ning\u00fan caso somos los responsables de la administraci\u00f3n de los sitios, que legalmente depende de los gobiernos municipales conjuntamente con las comunidades.<\/p>\n\n\n\n
Esperamos que los ejemplos que presentamos sirvan como una llamada de atenci\u00f3n y para continuar los esfuerzos coordinados entre los grupos interesados en la preservaci\u00f3n, conservaci\u00f3n y puesta en valor de nuestro Patrimonio Cultural arqueol\u00f3gico y de arte rupestre.<\/p>\n\n\n
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La Paz<\/strong><\/h4>\n\n\n\n
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Copacabana, La Paz<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
La arqueolog\u00eda de Copacabana<\/strong><\/p>\n\n\n\n
La regi\u00f3n del Lago Titicaca fue uno de los centros m\u00e1s poblados del mundo andino y cuenta con una larga historia de asentamientos, desde el Arcaico hasta nuestros d\u00edas. En la pen\u00ednsula de Copacabana encontramos innumerables restos arqueol\u00f3gicos de las culturas del per\u00edodo Formativo (Chiripa), Horizonte Medio (Tiwanaku), Intermedio Tard\u00edo (\u201cReinos Aymara\u201d) e Inka. Seg\u00fan el cronista Ramos Gavil\u00e1n en Copacabana resid\u00eda un gobernador incaico y los peregrinos a los templos de las islas del Sol y de la Luna pasaban por el lugar. En los alrededores existen varios sitios arqueol\u00f3gicos como el \u00abBa\u00f1o del Inka\u00bb, la \u00abHorca del Inka\u00bb – en realidad un observatorio astron\u00f3mico -, Kopakati, Lokha y un camino prehisp\u00e1nico empedrado. Las investigaciones arqueol\u00f3gicas y fuentes etnohist\u00f3ricas indican el rol de los sitios en los cultos de la poblaci\u00f3n local ya antes de la ocupaci\u00f3n incaica; m\u00e1s tarde fueron reutilizados, re-interpretados y en consecuencia modificados por la nueva administraci\u00f3n que vino del Cusco.<\/p>\n\n\n\n
El parque arqueol\u00f3gico de Copacabana<\/strong><\/p>\n\n\n\n
Frente al cementerio se encuentran dos \u00e1reas cercadas de rocas esculpidas, denominadas tambi\u00e9n arquitectura rupestre: Intinqala, sitio principal, y Orkojawira. Estas rocas son conocidas por el nombre de \u00abSilla del Inka\u00bb o \u00abTribunal del Inka\u00bb. Ya en el siglo XIX el viajero norteamericano George Squier public\u00f3 un dibujo de la roca principal de Intinkala con una breve descripci\u00f3n: \u00aben los arrabales del pueblo, cerca del cementerio, encontramos gran n\u00famero de nichos, escalones y lo que aparentemente estaba destinado a servir de asientos cortados en las rocas, los cuales pueden haber tenido alguna relaci\u00f3n con el antiguo culto.\u00bb En el siglo XX, estos monumentos fueron estudiados por los investigadores Leo Pucher, Hermann Trimborn, H. M\u00fcller-Beck, Maks Portugal Zamora, Oswaldo Rivera Sundt, Roberto Mantilla y Matthias Strecker. En el a\u00f1o 1941 se declar\u00f3 a las \u201cruinas incaicas de Copacabana\u201d Monumento Nacional mediante Decreto Supremo. En 1978 se cre\u00f3 el Parque Arqueol\u00f3gico cercando con malla ol\u00edmpica los dos sitios mencionados.<\/p>\n\n\n\n
Intinqala<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
En este lugar existen 17 monumentos esculpidos diseminados en sentido norte-sur. Es probable que originalmente hubieran existido a\u00fan m\u00e1s, ya que – seg\u00fan testimonios de los vecinos – algunas rocas fueron destruidas antes de la creaci\u00f3n del parque arqueol\u00f3gico. Seg\u00fan la tradici\u00f3n oral vigente ente los lugare\u00f1os, en el sitio se encontraban varias piezas l\u00edticas o \u00eddolos cuya desaparici\u00f3n se debi\u00f3 a la destrucci\u00f3n indiscriminada que hicieron los espa\u00f1oles de estas piezas.<\/p>\n\n\n\n
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Parque arqueol\u00f3gico de Intinqala y Orkojawira, Copacabana, ubicaci\u00f3n (SIARB).<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Parque arqueol\u00f3gico de Intinqala, Copacabana. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Roca esculpida en Intinqala, Copacabana. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
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El monumento principal es llamado \u00abTrono del Inka\u00bb, tiene varias gradas o especie de asientos.<\/p>\n\n\n\n
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Roca esculpida en Intinqala, \u201cTrono del Inca\u201d. Foto: Tamara Bray<\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
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En una roca grande y alargada un grabado un sistema de ch’alla<\/em> que consiste en una depresi\u00f3n profunda en la parte superior conectada a un canal y que forma la cabeza y el cuerpo de una serpiente. Un l\u00edquido vertido en la cabeza fluye hacia abajo y llega al suelo, como ofrenda a la Pachamama o diosa de la tierra.<\/p>\n\n\n\n
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Intinqala, superficie de roca con depresi\u00f3n conectada con un canal. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/strong><\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
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En 2016 se realiz\u00f3 una amplia excavaci\u00f3n en el sitio (ver el informe publicado en el Bolet\u00edn N\u00ba 33 de la SIARB). Se encontraron segmentos de muros, canales, pisos empedrados, dep\u00f3sitos de basura Inka, entierros, cer\u00e1mica Inka y tupus<\/em> de cobre o bronce.<\/p>\n\n\n\n
Orkojawira<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
Este sitio fue descubierto reci\u00e9n en 1967. Se halla a 200 metros al sureste de Intinkala. Tiene tres bloques tallados. La pieza m\u00e1s grande presenta tres sillares o pelda\u00f1os al estilo del \u00abTrono del Inka\u00bb. Se hall\u00f3 cer\u00e1mica Inka decorada de car\u00e1cter ceremonial en el sitio.<\/p>\n\n\n\n
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Roca esculpida en Orkojawira. Foto: Elizabeth Arkush<\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
Significado e importancia de las rocas esculpidas<\/strong><\/p>\n\n\n\n
El nombre Intinqala significa piedra del sol. Seg\u00fan la tradici\u00f3n aymara en este lugar \u00abse sentaba el sol\u00bb, por eso M. Portugal Zamora presumi\u00f3 que el sitio estaba consagrado para algunas ceremonias importantes dedicadas al culto del sol. El investigador alem\u00e1n H. Trimborn supone que un astr\u00f3nomo-sacerdote Inka se paraba en las gradas de la roca principal para observar la salida del sol por detr\u00e1s de una cima de la monta\u00f1a.<\/p>\n\n\n\n
Respectos a los numerosos pelda\u00f1os tallados, se habla generalmente de \u00abasientos\u00bb, aunque es poco probable que hubieran sido usados como tales, ya que las rocas exhiben gradas bajas que apuntan a diferentes direcciones; m\u00e1s probablemente se trata de peque\u00f1os altares o lugares para ofrendas. Todos los investigadores concuerdan en que se trata de un sitio religioso prehisp\u00e1nico.<\/p>\n\n\n\n
Los dem\u00e1s monumentos incaicos que exist\u00edan antes en Copacabana han desaparecido. Por eso, actualmente las rocas esculpidas de Intinkala y Orkojawira son los restos que m\u00e1s claramente demuestran la presencia inkaica en este lugar. De ah\u00ed su gran valor hist\u00f3rico.<\/p>\n\n\n\n
Kopakati <\/strong><\/h5>\n\n\n\n
A iniciativa de campesinos de la regi\u00f3n de Copacabana, se cre\u00f3 un parque arqueol\u00f3gico en la regi\u00f3n de Kopakati (a unos 4 km de Copacabana, cerca de la carretera, que une el pueblo con Kasani y Yunguyo), que cuenta con diversos elementos de arte rupestre, tales como pinturas, rocas esculpidas, \u201cc\u00fapulas\u201d o \u201ctacitas\u201d, petroglifos coloniales, aparte de terrazas, muros y restos arquitect\u00f3nicos. El sitio es mencionado en cr\u00f3nicas coloniales, tuvo mucho importancia como centro regional antes y durante del Incario, al parecer tambi\u00e9n durante loa Colonia.<\/p>\n\n\n\n
Existe se\u00f1alizaci\u00f3n, pero faltan los trabajos esenciales tales como: levantamiento topogr\u00e1fico, investigaci\u00f3n arqueol\u00f3gica, capacitaci\u00f3n de guarda ruinas y gu\u00edas, campa\u00f1a de educaci\u00f3n, interpretaci\u00f3n del sitio, administraci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n
Las obras actuales se deben a la iniciativa de los comunarios, adem\u00e1s un proyecto del gobierno central con el Banco Mundial que intent\u00f3 promover el turismo en la regi\u00f3n del lago Titicaca. Este proyecto fue abandonado habi\u00e9ndose logrado un 50% de las obras previstas, debido a varios problemas. No se coordin\u00f3 el proyecto con arque\u00f3logos y expertos en arte rupestre. La se\u00f1alizaci\u00f3n en Kopakati incluye placas informativas con texto equivocado.<\/p>\n\n\n\n
Uno de los mayores atractivos del sitio son pinturas rupestres, llamadas Banderani, lamentablemente varias veces vandalizadas.<\/p>\n\n\n\n
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Kopakati, roca con pinturas. Foto: J\u00falia Berra<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Kopakati, pintura rupestre. Dibujo: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Kopakati, pintura rupestre. Dibujo: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
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Tambi\u00e9n existe una roca esculpida incaica y una cantidad de c\u00fapulas.<\/p>\n\n\n\n
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Kopakati, roca esculpida. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Kopakati, roca con c\u00fapulas. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Los comunarios construyeron un camino de acceso a la parte alta del sitio donde existen importantes obras esculpidas incaicas.<\/p>\n\n\n\n
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Kopakati, sector alto. Rocas esculpidas. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/strong><\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
Este sitio podr\u00eda ser un atractivo interesante para el turismo nacional e internacional, sin embargo actualmente no tenemos perspectiva para su desarrollo sostenible, las obras realizadas han destruido parte del valor del sitio como hallazgos arqueol\u00f3gicos, todav\u00eda no existe administraci\u00f3n.<\/p>\n\n\n
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Pe\u00f1as, La Paz<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
La comunidad de Pe\u00f1as pertenece al Municipio de Batallas en la Tercera Secci\u00f3n Municipal de la Provincia Los Andes, Departamento de La Paz. Se halla a una distancia aproximada de 60 km. de la ciudad de La Paz a trav\u00e9s de la carretera asfaltada El Alto – Copacabana. El pueblo se encuentra a una altura de 3970 m.s.n.m., en un valle de altura con una posici\u00f3n privilegiada para iniciar desde all\u00ed excursiones a las monta\u00f1as de la Cordillera Real que se hallan pr\u00f3ximas.<\/p>\n\n\n\n
El Proyecto Pe\u00f1as, que la SIARB realiz\u00f3 en los a\u00f1os 2013-2014 en colaboraci\u00f3n con el Comit\u00e9 de Turismo local y con apoyo de la Embajada Alemana, permiti\u00f3 una prospecci\u00f3n arqueol\u00f3gica y la identificaci\u00f3n de numerosos sitios, el m\u00e1s importante, la cueva Qillqantiji en el cerro Wirak`oni, fue protegido mediante reja, se llev\u00f3 a cabo un diagn\u00f3stico de conservaci\u00f3n y la limpieza de grafitis, as\u00ed como una documentaci\u00f3n minuciosa de las pinturas rupestres. Los visitantes de la zona pueden entrar a la cueva acompa\u00f1ados por un gu\u00eda del Comit\u00e9 de Turismo.<\/p>\n\n\n\n
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Vista a la cueva Qillqantiji, Pe\u00f1as. Foto: Claudia Rivera, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cercado de la cueva Qillqantiji. Foto: Freddy Taboada, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cueva Qillqantiji, letrero. Foto: Matthias Strecker, SIARB.<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
El arte rupestre de Qillqantiji se distribuye en tres paneles. Presenta pinturas en los colores rojo y blanco, principalmente, algunas en color amarillo. A la derecha de la entrada se destaca un conjunto de llamas en hileras, gran parte de las cuales est\u00e1n entrando a un corral.<\/p>\n\n\n\n
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Cueva Qillqantiji, sector de representaci\u00f3n de corrales y cam\u00e9lidos. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/strong><\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
Adem\u00e1s, se hallan en el mismo panel numerosas figuras de cam\u00e9lidos serpientes (algunas con dos cabezas, una con tres cabezas), hombres, mascarones y otras. Es el \u00fanico sitio conocido en la regi\u00f3n del Lago Titicaca con esta clase de serpientes y mascarones que comparten la iconograf\u00eda de monumentos del estilo Yaya Mama del per\u00edodo Formativo, con una posible antig\u00fcedad de dos mil a\u00f1os.<\/p>\n\n\n\n
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Cueva Qillqantiji, centro del panel 1: representaci\u00f3n de mascar\u00f3n, cam\u00e9lidos, figuras humanas y serpiente. Dibujo: Freddy Taboada, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Piedra esculpida de Chiripa (per\u00edodo Formativo), estilo Yaya Mama. Musaeo Nacional de Arqueolog\u00eda (MUNARQ). Foto: Freddy Taboada, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cueva Qillqantiji. Pintura de v\u00edbora de dos cabezas., cam\u00e9lidos, figura antropomorfa y otras. Foto (DStretch): Freddy Taboada, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
La SIARB ha publicado una gu\u00eda sobre Pe\u00f1as que resume historia, arqueolog\u00eda y arte rupestre del lugar. Adem\u00e1s, recomendamos la lectura del estudio de Freddy Taboada, publicado en el libro \u201cArte Rupestre de la Regi\u00f3n del Lago Titicaca\u201d (2016).<\/p>\n\n\n
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Oruro<\/strong><\/h4>\n\n\n\nCalacala, Oruro<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
Calacala, top\u00f3nimo aymara que significa \u00abregi\u00f3n de muchas rocas\u00bb, es el nombre de un valle cordillerano en el cant\u00f3n Bulla\u00edn de la provincia Cercado, a 21 km. al suroeste de la ciudad de Oruro. La zona donde se encuentra el arte rupestre tambi\u00e9n es conocida como \u00abQuellqata\u00bb (\u00abescrito\u00bb) y se encuentra a una distancia de 2 km. del pueblo de Calacala y a aprox. 4.050 m.s.n.m. A primera vista, se ve una extensa y empinada formaci\u00f3n rocosa en cuyo pie est\u00e1n situados una peque\u00f1a cueva y un alero.<\/p>\n\n\n\n
El Instituto Nacional de Arqueolog\u00eda (INAR), bajo la direcci\u00f3n de Carlos Ponce S. cerc\u00f3 un \u00e1rea de 23 x 60 m para proteger el sitio principal de arte rupestre, cuya gran importancia fue reconocida por el Decreto Supremo N\u00ba 09087 del 5 de febrero de 1970 declarando al sitio Monumento Nacional. Por muchos a\u00f1os, la administraci\u00f3n del parque arqueol\u00f3gico de Calacala estaba a cargo del Museo Nacional Antropol\u00f3gico \u00abEduardo L\u00f3pez Rivas\u00bb de Oruro, a partir de 2005 est\u00e1 a cargo del Gobierno Aut\u00f3nomo Municipal de Soracachi.<\/p>\n\n\n\n
Grabados y pinturas rupestres de Calacala<\/strong><\/p>\n\n\n\n
El arte rupestre del sitio se encuentra distribuido en tres sectores: Una peque\u00f1a cueva y dos sectores de la pared rocosa formando una especie de refugio.<\/p>\n\n\n\n
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Cueva Qillqantiji, pinturas blancas: serpiente de tres cabezas, cam\u00e9lidos y figuras antropomorfas. Foto: Matthias Strecker<\/figcaption><\/figure><\/li>
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ImageJ=1.43i<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
La gran mayor\u00eda de las figuras est\u00e1 pintada en diferentes tonalidades de rojo oscuro, rojizo, blanco y negro. Sin embargo, tambi\u00e9n existe una cantidad de motivos grabados; adem\u00e1s series de depresiones artificiales redondas (\u00abc\u00fapulas\u00bb), que fueron talladas tanto en la cueva como en la pared del alero, est\u00e1n alineadas en filas y forman parte importante del conjunto, desconoci\u00e9ndose su funci\u00f3n – posiblemente, se trata de oquedades para recibir alg\u00fan l\u00edquido de ofrendas.<\/p>\n\n\n\n
Predomina claramente un tema: cam\u00e9lidos (muy probablemente llamas), mayormente representadas en grupos, a veces conectadas por una cuerda a sus pastores. Tambi\u00e9n aparecen felinos que, seg\u00fan las creencias aymaras, fueron los \u00abdue\u00f1os\u00bb m\u00edticos de las reba\u00f1os de llamas. Domina el panel a la derecha una llama blanca grande (60 cm de alto), el animal favorito para sacrificios en la regi\u00f3n andina.<\/p>\n\n\n\n
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Calacala, alero y conjunto de pinturas. Fotos: Rainer Hostnig<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Calacala, conjunto de pinturas y c\u00fapulas. Dibujo: Ren\u00e1n Cordero<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Calacala, pinturas de cam\u00e9lidos y pastor. Foto: Roland F\u00e9lix<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Hacia una historia cultural de Calacala<\/strong><\/p>\n\n\n\n
Recientes investigaciones arqueol\u00f3gicas muestran una larga secuencia de ocupaci\u00f3n en la cuenca de Calacala. Seg\u00fan estos datos, el primer establecimiento se habr\u00eda dado ya en el Arcaico (aprox. 10.000 a.C.), siguiendo con una leve – pero significativa – ocupaci\u00f3n durante el Formativo (1.500 a.C.). Sin embargo, es el desarrollo local el que presenta mayores evidencias de uso intensivo de la cuenca. Este continu\u00f3 durante el Horizonte Tard\u00edo (aprox. 1400 d.C.) hasta la Colonia.<\/p>\n\n\n\n
De esta manera, se comprueba la importancia de Calacala dentro del contexto regional prehisp\u00e1nico. Dicha importancia pudo estar relacionada con la estrat\u00e9gica ubicaci\u00f3n de la cuenca, convirti\u00e9ndose en parte de un corredor que conectaba varios pisos ecol\u00f3gicos. Este aspecto promueve la necesidad de mayor investigaci\u00f3n, la cual aportar\u00e1 al conocimiento prehisp\u00e1nico de los Andes meridionales.<\/p>\n\n\n\n

El proyecto del parque arqueol\u00f3gico de Calacala<\/strong><\/p>\n\n\n\n
En 1999, la SIARB, apoyada por la GTZ (Cooperaci\u00f3n Alemana para el Desarrollo), la H. Alcald\u00eda de Oruro, el Museo Nacional Antropol\u00f3gico \u00abEduardo L\u00f3pez Rivas\u00bb y la comunidad de Calacala, inici\u00f3 este proyecto que culmin\u00f3 en el a\u00f1o 2002 con la inauguraci\u00f3n de una pasarela para visitantes. Esta obra fue financiada por las Embajadas de Alemania y Holanda y la Fundaci\u00f3n Bradshaw. Facilita la visita de los turistas que tienen una mejor visi\u00f3n de los grabados y pinturas rupestres. Adem\u00e1s, ayuda a preservar estos testimonios art\u00edsticos y arqueol\u00f3gicos, ya que ning\u00fan visitante trepar\u00e1 la roca, acci\u00f3n que da\u00f1\u00f3 el sitio en el pasado.<\/p>\n\n\n\n
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Calacala, acto de inauguraci\u00f3n del parque arqueol\u00f3ico. Foto: archivo SIARB<\/figcaption><\/figure><\/div>\n\n\n
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POTOSI<\/strong><\/h5>\n\n\n\nLajasmayu, Potos\u00ed<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
Betanzos es la capital de la Provincia Cornelio Saavedra. Se encuentra en la regi\u00f3n centro este del Departamento de Potos\u00ed, a 48 km al este de la ciudad de Potos\u00ed en plena v\u00eda asfaltada hacia la ciudad de Sucre (distancia a Sucre: 107 km) y a una altura de 3.116 m.s.n.m. La regi\u00f3n se encuentra al pie de la Cordillera de Potos\u00ed, en una meseta comprendida entre los cerros Tumilki y Rosario.<\/p>\n\n\n\n
La regi\u00f3n de Betanzos ha sido estudiada por varios investigadores que realizaron trabajos de reconocimiento arqueol\u00f3gico (Patrice Lecoq y Ricardo C\u00e9spedes 1997, Pablo Cruz 2007, Claudia Rivera y el equipo de la SIARB 2009). A trav\u00e9s de estos trabajos se ha podido establecer una secuencia cronol\u00f3gica regional que abarca un lapso de unos 10.000 a\u00f1os y comprende los per\u00edodos Precer\u00e1mico (8000-2000 a.C.), Formativo (2000 a.C – 400 d.C.), Desarrollos Regionales Tempranos (400-800 d.C.), Desarrollos Regionales Tard\u00edos (800-1430 d.C.) y Horizonte Tard\u00edo (1430-1540 d.C.).<\/p>\n\n\n\n
Los sitios arqueol\u00f3gicos y de arte rupestre de Lajasmayu en el Municipio de Betanzos, Depto. de Potos\u00ed, pertenecen a los lugares patrimoniales m\u00e1s importantes en Bolivia. Su investigaci\u00f3n ya empez\u00f3 en los a\u00f1os 1970, sin embargo reci\u00e9n en el a\u00f1o 2007 la H. Alcald\u00eda de Betanzos y la SIARB iniciaron un proyecto para preservar las pinturas del cerro de Lajasmayu, investigar la arqueolog\u00eda regional y crear un parque arqueol\u00f3gico.<\/p>\n\n\n\n
Los sitios de arte rupestre de Lajasmayu<\/strong><\/p>\n\n\n\n
Lajasmayu se halla aproximadamente a 4 km al este de Betanzos. A 3,5 km del pueblo, en la carretera que va de Betanzos a Sucre, hay un desv\u00edo que conduce al r\u00edo Lajasmayu y a los sitios de arte rupestre que se encuentran cruzando el r\u00edo.<\/p>\n\n\n\n
El cerro de Lajasmayu es una formaci\u00f3n prominente de piedra arenisca en forma alongada que domina el paisaje de la zona. Posee dos sitios de arte rupestre:<\/p>\n\n\n\n
– Lajasmayu 1 (Supay Molino Khakha), a unos 50 m de distancia del r\u00edo, tiene pinturas en una longitud de unos 10 m y en una altura de hasta 4 m (hay un motivo a una altura excepcional de 6 m). Posee unos 80 motivos pintados.<\/p>\n\n\n\n
– Lajasmayu 2 (Sara Cancha), se ubica a unos 230 m m\u00e1s al noreste y en la parte alta del cerro. Tiene una extensi\u00f3n de m\u00e1s de 80 metros. En los a\u00f1os 1970-1980 exist\u00edan todav\u00eda centenares de motivos pintados; en la actualidad, una parte considerable ha sido destruida por actos vand\u00e1licos.<\/p>\n\n\n\n
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Vista del cerro Lajasmayu, cerca de Betanzos, Potos\u00ed. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
En la vecindad del cerro y sus paneles de arte rupestre se encontraron numerosos vestigios arqueol\u00f3gicos como hallazgos de superficie, tales como instrumentos l\u00edticos \u2013 posibles evidencias de campamentos durante el Precer\u00e1mico \u2013 y cer\u00e1mica de per\u00edodos posteriores.<\/p>\n\n\n\n
El arte rupestre de Lajasmayu consta principalmente de pinturas, en gran parte son monocromas, sin embargo existen tambi\u00e9n figuras pintadas en dos colores. Los colores usados son blanco, plomo, rojo, rojo oscuro (violeta), rojizo, negro y amarillo; predominan el rojo y el blanco. Los motivos bicromos est\u00e1n pintados en blanco y rojo, blanco y negro, rojo y negro, rojo y anaranjado, amarillo y rojo. En el sitio Lajasmayu 2 constatamos tambi\u00e9n tres grabados de cruces, probablemente del per\u00edodo colonial.<\/p>\n\n\n\n
El an\u00e1lisis del repertorio del arte rupestre de Lajasmayu permite constatar las siguientes categor\u00edas:<\/p>\n\n\n\n
Figuras antropomorfas, muestran representaciones de hombres, frecuentemente en grupos, a veces con adornos de penachos de plumas, a veces con vestimenta decorada.<\/li>
Figuras zoomorfas. La gran mayor\u00eda representan cam\u00e9lidos en reba\u00f1os, en actitud din\u00e1mica, como corriendo (parece que se trata de animales no domesticados, posiblemente guanacos). Adem\u00e1s, existen representaciones de venados o c\u00e9rvidos, otros mam\u00edferos, aves incluyendo un avestruz y serpientes.<\/li>
Figuras fitomorfas, es decir, figuras que parecen representar plantas.<\/li>
Objetos. Existe una representaci\u00f3n de un tejido.<\/li>
Figuras abstractas, como \u201cmallas\u201d o \u201crejas\u201d, c\u00edrculos simples o conc\u00e9ntricos, c\u00edrculos con rayos (elementos solares), l\u00edneas en zigzag, l\u00edneas con rayas, espirales, cruces, \u201cescaleras\u201d, dise\u00f1os formados por puntos y composiciones o dise\u00f1os complejos y otros.<\/li><\/ul>\n\n\n\n
En particular, las muy diversas representaciones antropomorfas muestran diferentes tradiciones y son uno de los indicios de que el arte rupestre en Lajasmayu abarca diferentes per\u00edodos por miles de a\u00f1os.<\/p>\n\n\n\n
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Lajasmayu 1. Peque\u00f1as figuras antropomorfas debajo del motivo anterior.<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Peque\u00f1as figuras antropomorfas debajo del motivo anterior<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
La mayor\u00eda de los animales representan cam\u00e9lidos silvestres, posiblemente guanacos, aparte de aves y serpientes.<\/p>\n\n\n\n
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Lajasmayu 2. Fila de cam\u00e9lidos silvestres. Dibujo: SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Pintura de suri. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Suri. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 2. Representaci\u00f3n de dos aves volando. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Presentamos ejemplos de las figuras abstractas y la probable representaci\u00f3n de un tejido:<\/p>\n\n\n\n
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Lajasmayu 1. Se notan diferentes figuras abstractas: l\u00edneas en zigzag, \u201creja\u201d, s\u00edmbolo \u201csolar\u201d y otras. Foto: Pablo Cruz, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Figura cruciforma, figura fitomorfa y otras. Foto: Pablo Cruz, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Cruz prehisp\u00e1nica que consiste de nueve l\u00edneas paralelas. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 2. Composici\u00f3n abstracta de l\u00edneas en blanco, en superposici\u00f3n sobre figuras rojas m\u00e1s antiguas. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Probable representaci\u00f3n de un tejido. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Dibujo: Jorge Aranibar, SIARB.<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
En varios paneles de pinturas vemos superposiciones de motivos que permiten establecer una secuencia de diferentes estilos. Por ejemplo, en Lajasmayu 1 existe un conjunto de motivos de por lo menos tres fases: cam\u00e9lidos (en parte debajo de una l\u00ednea pintada en rojo y blanco) y una especie de red, figuras antropomorfas en forma de \u201creloj de arena\u201d con penacho de plumas que se dan la mano, en parte debajo de una composici\u00f3n abstracta, ver las siguientes ilustraciones.<\/p>\n\n\n\n
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Lajasmayu 1. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Lajasmayu 1. Dibujo: Jorge Aranibar, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
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En Lajasmayu 2 (Sara Cancha) las superposiciones de las pinturas permiten distinguir entre siete fases prehisp\u00e1nicas, que corresponden a un desarrollo de miles de a\u00f1os. Adem\u00e1s, existen algunas figuras que pertenecen ya a la Colonia.<\/p>\n\n\n\n
Las primeras representaciones presentan escenas de cam\u00e9lidos silvestres y cazadores del Arcaico. Tambi\u00e9n se han representado figuras de \u201crejas\u201d que al parecer corresponden a trampas impidiendo la fuga de los animales.<\/p>\n\n\n\n
El proyecto del parque arqueol\u00f3gico de Lajasmayu<\/strong><\/p>\n\n\n\n
Este proyecto se realiz\u00f3 en los a\u00f1os 2008-2011. En julio del 2008, el Consejo Municipal de Betanzos sancion\u00f3 la Ordenanza declarando al cerro Lajasmayu y sus sitios de arte rupestre \u201cBien de Dominio P\u00fablico y Patrimonio Institucional, Patrimonio Hist\u00f3rico y Cultural Municipal\u201d.<\/p>\n\n\n\n
El proyecto, que fue financiado por la Embajada de EE.UU. y el Gobierno Municipal Aut\u00f3nomo de Betanzos, logr\u00f3 construir un sendero de acceso, realizar una prospecci\u00f3n arqueol\u00f3gica, avanzar con la documentaci\u00f3n y el an\u00e1lisis del arte rupestre y \u2013 temporalmente \u2013 borrar gran parte de los grafitis en un trabajo de conservadores profesionales; adem\u00e1s, se edit\u00f3 una gu\u00eda para visitantes. Sin embargo \u2013 a pesar de una capacitaci\u00f3n inicial de comunarios como gu\u00edas \u2013 no se logr\u00f3 una administraci\u00f3n y protecci\u00f3n del sitio, debido a un conflicto entre la comunidad y la Alcald\u00eda.<\/p>\n\n\n
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Chuquisaca<\/strong><\/h4>\n\n\n\n
Incamachay-Pumamachay, Chuquisaca<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
Ubicaci\u00f3n<\/strong><\/p>\n\n\n\n
El sitio Incamachay se encuentra en el cant\u00f3n Chaunaca, provincia Oropeza, Depto. de Chuquisaca; est\u00e1 en territorio de la comunidad Tumpeca, del Distrito Municipal N\u00ba 8 de la ciudad de Sucre. El lugar se conoce con el nombre Patatoloyo (nombre de un caser\u00edo en la proximidad), se ubica en una quebrada perteneciente a la serran\u00eda de Chataquila. El ingreso se da por la carretera que va de Sucre a Ravelo, 32 km en movilidad, posteriormente hay que caminar unos 7 km (2 horas) por un sendero.<\/p>\n\n\n\n
La cueva Pumamachay se halla se encuentra en la cercan\u00eda inmediata de Incamachay, a una distancia de solo 150 m.<\/p>\n\n\n\n
Antecedentes de la investigaci\u00f3n<\/strong><\/p>\n\n\n\n
Uno de los primeros investigadores de Incamachay fue el austriaco Leo Pucher quien visit\u00f3 el sitio en los a\u00f1os 1940. A fines de los a\u00f1os 1950, el arque\u00f3logo alem\u00e1n Heinz Walter estudi\u00f3 estas pinturas; public\u00f3 un breve relato sobre su visita en un libro de divulgaci\u00f3n popular (Disselhoff 1960). Otros investigadores que se ocuparon del sitio fueron D. E. Ibarra Grasso (1965), D. Kuljis y V. Bustos (1977). A partir de los a\u00f1os 1980 Edmundo Salinas dedic\u00f3 varias publicaciones a Incamachay y Pumamachay (Salinas 1987, 2000, 2001). Posteriormente Velia Mendoza (2003) public\u00f3 un estudio y documentaci\u00f3n detallada de ambos sitios.<\/p>\n\n\n\n
El parque arqueol\u00f3gico de Incamachay – Pumamachay <\/strong><\/p>\n\n\n\n
Debido a la importancia de sus pinturas rupestres, en 1958 Incamachay fue declarado Monumento Nacional (Decreto Superior 4954 del 27 de mayo de 1958). A fines del a\u00f1o 2002, la H. Alcald\u00eda de Sucre construy\u00f3 un muro delante del sitio para controlar el ingreso de visitantes y una casa para el guarda ruinas. En mayo del a\u00f1o 2004 se inici\u00f3 una nueva fase del proyecto del parque arqueol\u00f3gico, gracias a un convenio de la Alcald\u00eda con la Sociedad de Investigaci\u00f3n del Arte Rupestre de Bolivia (SIARB). Se realiz\u00f3 una capacitaci\u00f3n para el guarda ruinas y otros comunarios de Tumpeca, Chaunaca y otras comunidades; adem\u00e1s, se logr\u00f3 un nuevo registro y documentaci\u00f3n fotogr\u00e1fica y se llevaron a cabo los primeros ensayos de conservaci\u00f3n (limpieza de grafitis) de parte del experto norteamericano Johannes Loubser. El sendero en el alero de Incamachay fue empedrado y se instalaron cajas informativas. Se instal\u00f3 una reja de seguridad en la cueva de Pumamachay, sitio que sufri\u00f3 la sustracci\u00f3n de una figura rupestre. Se public\u00f3 una gu\u00eda en dos idiomas (espa\u00f1ol e ingl\u00e9s) para los visitantes y se edit\u00f3 un video (DVD) sobre el proyecto. Se redact\u00f3 un Reglamento Interno para la administraci\u00f3n del sitio. Estos trabajos contaron con el apoyo de las Embajadas de Holanda, EE.UU. y Alemania.<\/p>\n\n\n\n
El arte rupestre de Incamachay<\/strong><\/p>\n\n\n\n
El arte rupestre de Incamachay se halla en un alero, una especie de refugio con techo, que se extiende en direcci\u00f3n sur – norte y tiene una orientaci\u00f3n hacia el oeste. Tiene una altura de 3.510 m.s.n.m., una longitud de 42 m, un ancho de 19 m y la altura del techo es de 5,70 m.<\/p>\n\n\n\n
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Alero de Incamachay. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Incamachay. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Incamachay, letrero. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
En este lugar, la pared y el techo fueron decorados con pinturas en varios colores, adem\u00e1s existen algunos grabados y una \u00abc\u00fapula\u00bb o tacita, una depresi\u00f3n redonda artificial en el piso. La investigadora Velia Mendoza (2003) registr\u00f3 141 elementos de arte rupestre que en su mayor\u00eda corresponden a pinturas. Han sido pintadas en las siguientes variantes: figuras blancas, rojas y las que utilizan dos colores – motivos blancos con borde rojo, o rojos con borde blanco; adem\u00e1s existen algunas pocas figuras en color verduzco, azul, negro o rosado.<\/p>\n\n\n\n
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Incamachay. Foto montaje: Robert Mark, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Parte central de las pinturas de Incamachay. Dibujo: Luis F. Ticona.<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Es probable que los artistas antiguos hayan utilizado pigmentos naturales que se encuentran en la cercan\u00eda. Los motivos son en primer lugar antropomorfos, aparte de algunos zoomorfos y geom\u00e9tricos o abstractos.<\/p>\n\n\n\n
La gran mayor\u00eda de las representaciones antropomorfos consiste de figuras humanas estilizadas, muy simples. Un redondo representa la cabeza, cuerpo y brazos levantados aparecen como l\u00edneas. En un caso la figura ha sido colocada sobre una especie de \u00abpedestal\u00bb. Una figura de un hombre apuntando un arco con flecha, dibujada en rojo, claramente se distingue del patr\u00f3n anterior y parece pertenecer a otro per\u00edodo de ejecuci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n
Hay algunas figuras zoomorfas. Entre los pocos grabados existen posibles tarukas o ciervos. Entre las pinturas, E. Salinas (1987) identifica una figura bicroma (rojo con borde blanco) tentativamente como un b\u00faho, aunque tambi\u00e9n (en su publicaci\u00f3n del a\u00f1o 2000) menciona que \u00abse afirma que se podr\u00eda tratarse de un puma\u00bb. Otra figura, pintada en la misma combinaci\u00f3n de colores, ha llamado tambi\u00e9n la atenci\u00f3n de los estudiosos y fue interpretada de diferentes maneras, como mono o sapo.<\/p>\n\n\n\n
Existe cierta ambig\u00fcedad entre ambas categor\u00edas, antropomorfos y zoomorfos. Se podr\u00eda considerar una figura \u00abantropomorfa\u00bb – con dobles extremidades levantadas hacia arriba y otras hacia abajo – como la representaci\u00f3n de un animal. Por otro lado, existe otro \u00abantropomorfo\u00bb con una l\u00ednea vertical entre las piernas, que termina en un trid\u00edgito y podr\u00eda representar el sexo o una cola.<\/p>\n\n\n\n
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Incamachay. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Incamachay. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Finalmente tenemos dise\u00f1os geom\u00e9tricos o abstractas: cruces (que podr\u00edan datar del per\u00edodo precolombino), c\u00edrculos y formas rectangulares con divisiones interiores.<\/p>\n\n\n\n
Los investigadores no han podido aclarar todav\u00eda la antig\u00fcedad de estas manifestaciones art\u00edsticas del pasado y su significado. Todos los estudiosos coincidieron en asignar el arte rupestre de Incamachay a un per\u00edodo prehisp\u00e1nico cuya cronolog\u00eda es un inc\u00f3gnito. No se han encontrado otros hallazgos arqueol\u00f3gicos asociados con este arte. Parece que se trata de un sitio alejado de asentamientos, cuya funci\u00f3n se relacionaba con ciertos ritos de los cultos religiosos. V. Mendoza opina respecto a Incamachay y al sitio cercano de Pumamachay: \u00abes muy probable que hayan servido como lugares ceremoniales o rituales, donde se llevaban a cabo actividades religiosas. Esta suposici\u00f3n, que descarta la funci\u00f3n habitacional, se basa en la ubicaci\u00f3n de los sitios en lugares poco accesibles, con pendientes elevadas, sin espacio donde cultivar, aparte de la escasa presencia de material arqueol\u00f3gico, las condiciones ambientales que var\u00edan del d\u00eda a la noche como vientos muy fuertes al anochecer, lluvias torrenciales, escasa fauna y flora comestibles.\u00bb<\/p>\n\n\n\n
Un indicio para un uso ritual del sitio podr\u00eda ser la \u00abc\u00fapula\u00bb o tacita (depresi\u00f3n redonda artificial) que se halla en el piso del alero. Podr\u00eda haber servido para recibir alguna ofrenda.<\/p>\n\n\n\n
El impacto visual de este conjunto pict\u00f3rico brillantes es impresionante. Muchos observadores del arte rupestre de Incamachay han quedado impresionados por el fuerte colorido de las pinturas.<\/p>\n\n\n\n
Por otro lado, lastimosamente el alero ha sido afectado por numerosos actos vand\u00e1licos, desde inscripciones de propaganda hasta los actos de rebordear pinturas con lodo o mojarlas con agua. La Sociedad de Investigaci\u00f3n del Arte Rupestre de Bolivia (SIARB) ha realizado los primeros ensayos de medidas de conservaci\u00f3n incluyendo tratamiento para borrar algunos vestigios del vandalismo de visitantes.<\/p>\n\n\n\n
La cueva de Pumamachay <\/strong><\/p>\n\n\n\n
A diferencia de Incamachay, Pumamachay es una peque\u00f1a cueva, ubicada a mayor altura y cerca de una poza de agua.<\/p>\n\n\n\n
$\"\"$ Vista de la cueva Pumamachay. Foto: Carola Condarco, SIARB<\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
El sitio fue descubierto reci\u00e9n en el a\u00f1o 1973 por Edmundo Salinas, acompa\u00f1ado por Juan Puma, vecino de la comunidad ind\u00edgena Tumpeka; recibi\u00f3 su nombre en honor a este \u00faltimo. Fue descrito por E. Salinas en dos publicaciones (1987, 2000). A fines de 2002, el sitio fue documentado por V. Mendoza quien registr\u00f3 16 motivos de arte rupestre, todos ejecutados en color negro, que se encuentran en el interior, en la parte derecha de la cueva. A esta cantidad hay que agregar otro motivo (una figura antropomorfa con extremidades extendidas) que lamentablemente fue sustra\u00eddo por alg\u00fan visitante delincuente sin escr\u00fapulos; adem\u00e1s, notamos varios grabados de c\u00edrculos cerca de la entrada..<\/p>\n\n\n\n
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Pumamachay, foto montaje de Robert Mark, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Los motivos caen en dos grupos: figuras geom\u00e9tricas (espirales, formas circulares y otras l\u00edneas) y biomorfas (figuras zoomorfas y un antropomorfo). La figura N\u00ba 12 podr\u00eda representar un mono; es muy parecido a un motivo bicromo en Incamachay. La figura N\u00ba 17, sustra\u00edda, fue identificada por E. Salinas como antropomorfo con una especie de penacho.<\/p>\n\n\n\n
Mientras actualmente no tenemos indicios de la antig\u00fcedad del arte rupestre de Incamachay, en el caso de Pumamachay existe una aproximaci\u00f3n a la cronolog\u00eda por la comparaci\u00f3n con la decoraci\u00f3n de cer\u00e1mica. Salinas C. (2000) not\u00f3 un gran parecido de un motivo con la decoraci\u00f3n de vasijas de la cer\u00e1mica Huruquilla, tambi\u00e9n pintadas en negro, por lo que asigna una antig\u00fcedad m\u00e1xima de 1.000 a\u00f1os a los dibujos rupestres. Esta cer\u00e1mica se caracteriza por decoraci\u00f3n compleja, casi siempre geom\u00e9trica (conjuntos de espirales, formas circulares y ovaloides, tri\u00e1ngulos, cruces). Recientes investigaciones apuntan a una cronolog\u00eda a\u00fan m\u00e1s temprana de la cer\u00e1mica Huruquilla y estilos parecidos, por lo menos en sus or\u00edgenes, ya que fragmentos fueron encontrados en sitios del per\u00edodo Tiwanaku IV Temprano (400-600 d.C.) y V Temprano (800-1000 d.C.), como informan los investigadores Patrice Lecoq y Ricardo C\u00e9spedes (1997: 245).<\/p>\n\n\n\n
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Cer\u00e1mica de la cultura Huruquilla en el Museo Antropol\u00f3gico de la Universidad, Sucre (seg\u00fan d. Ibarra Grasso y R. Querejazu Lewis 1986)<\/figcaption>\n<\/figure>\n<\/div>\n
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Santa Cruz<\/strong><\/h4>\n\n\n\n
El Municipio Moro Moro es la Tercera Secci\u00f3n Municipal de la Provincia Vallegrande, del Departamento de Santa Cruz. Su territorio est\u00e1 formado por cadenas monta\u00f1osas, con elevaciones accidentadas, rocosas y de pendientes. La zona corresponde a la regi\u00f3n monta\u00f1osa de la faja subandina que comprende las estribaciones orientales de la cordillera de los Andes.<\/p>\n\n\n\n
La regi\u00f3n de los valles cruce\u00f1os tuvo una larga ocupaci\u00f3n humana que present\u00f3 distintas caracter\u00edsticas culturales a trav\u00e9s del tiempo. \u00c9stas han sido agrupadas por los estudiosos en diferentes per\u00edodos prehisp\u00e1nicos: El Precer\u00e1mico o Arcaico (cuyo inicio no se puede establecer actualmente y que dur\u00f3 hasta aproximadamente 2.000 a.C.), el Formativo (2000 a.C. – 400 d.C.), los Desarrollos Regionales(400-1430 d.C.), finalmente el per\u00edodo Tard\u00edo o Inka (1430-1540 d.C.).<\/p>\n\n\n\n
La cueva de Paja Colorada y sus alrededores evidencian tambi\u00e9n un largo desarrollo cultural que se refleja en su arte rupestre y en otros hallazgos arqueol\u00f3gicos. En una prospecci\u00f3n regional en los alrededores de la cueva, los arque\u00f3logos constataron la existencia de 33 sitios arqueol\u00f3gicos consistentes en sitios de habitaci\u00f3n y posibles campos agr\u00edcolas. La mayor\u00eda de estos lugares presenta cer\u00e1mica asociada a tradiciones de las tierras bajas como el estilo Gray Ware. Por otro lado, en la excavaci\u00f3n arqueol\u00f3gica de la cueva se hallaron restos de dos fogones, cuya antig\u00fcedad se establecieron mediante la dataci\u00f3n radiocarb\u00f3nica en un laboratorio de Australia. Los resultados indican fechas entre el 200 y 900 d.C. Sin embargo, los expertos en arte rupestre han concluido que la secuencia de pinturas y grabados en la cueva debe haber empezado mucho antes.<\/p>\n\n\n\n
La cueva de Paja Colorada<\/strong><\/p>\n\n\n\n
El sitio se encuentra a una altura de 2165 m.s.n.m. en la ladera de un cerro, cerca del pueblo La Laja. Se trata de una cueva peque\u00f1a con forma oval, de 5,80 m de profundidad y 2,40 m de ancho medio y una altura media de 2,50 a 3 m; tiene una entrada grande que est\u00e1 orientada hacia el sur (SSO) y permite una amplia vista a una quebrada y otras serran\u00edas. Est\u00e1 formada por roca arenisca que se halla en varios estados de degradaci\u00f3n, con problemas de conservaci\u00f3n.<\/p>\n\n\n\n
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Reja en la entrada de la cueva Paja Colorada. Foto: Freddy Taboada, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
En la cueva existen m\u00e1s de 130 motivos entre pinturas, grabados y \u201cc\u00fapulas\u201d o \u201ctacitas\u201d (depresiones redondas artificiales) en cinco paneles.<\/p>\n\n\n\n
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Plano de la cueva Paja Colorada (Freddy Taboada, SIARB)<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Paredes pintadas de la cueva Paja Colorada. Foto mosaico de Robert Mark, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
La t\u00e9cnica de elaboraci\u00f3n predominante es la pintura con tres modalidades: monocromo (de un solo color), bicromo (motivo pintado en dos colores) y en negativo. Los colores utilizados son el rojo, el blanco, el amarillo (en menor proporci\u00f3n) y el negro (muy limitado, solamente en la reproducci\u00f3n de una cruz cristiana).<\/p>\n\n\n\n
Se analizaron muestras de las pinturas en un laboratorio de Canad\u00e1. Seg\u00fan los datos de los especialistas I. Wainwright y M. Raudsepp, las pinturas se elaboraron en base a minerales como hematita, kaolin, etc., probablemente de dep\u00f3sitos naturales en los alrededores.<\/p>\n\n\n\n
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Paja Colorada, Panel 1. Foto: Roland F\u00e9lix, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Una figura antropomorfa de color blanco domina el panel 1 por su posici\u00f3n y tama\u00f1o (altura: 1,13 m). Porta en su mano izquierda (a la derecha del observador) una especie de bast\u00f3n o b\u00e1culo, al parecer con hacha, en su mano derecha otro objeto con franjas. La representaci\u00f3n estilizada no permite reconocer los detalles de la vestimenta. Parece que la figura lleva una especie de sombrero o m\u00e1scara y una t\u00fanica con un ap\u00e9ndice hacia abajo. A la derecha, entre el cuerpo del hombre y su bast\u00f3n, se ve una l\u00ednea serpentiforme. Alrededor de la figura humana se encuentran muchos otros dibujos, sobre todo animales.<\/p>\n\n\n\n
En una fase posterior, se pintaron animales rojos o policromos (rojo y blanco), en parte en superposici\u00f3n sobre las figuras blancas anteriores. Se usaron puntos para llenar el interior de los animales u otros, puestos en fila, para acompa\u00f1ar el contorno. En dos casos, el interior de un animal fue llenado con puntos blancos y rojos. Adem\u00e1s, existen figuras humanas rojas muy esquem\u00e1ticas al lado de estos animales. Por otro lado, se nota una l\u00ednea roja debajo de la figura antropomorfa grande, lo que parece indicar que no hab\u00eda mucha diferencia de tiempo entre los dos per\u00edodos de los dibujos blancos y los rojos y policromos.<\/p>\n\n\n\n
Tambi\u00e9n hay unos cuantos motivos pintados en bicrom\u00eda rojo-amarillo, incluyendo un dibujo abstracto amarillo con contorno rojo.<\/p>\n\n\n\n
Esparcidas en las tres paredes de la cueva existen m\u00e1s de 30 manos blancas y varios motivos abstractos, producidos en t\u00e9cnica negativa, en la que se pinta o roc\u00eda pintura alrededor de las manos puestas sobre la superficie rocosa. Parece que pertenecen a la primera fase de decoraci\u00f3n de la cueva, en parte se encuentran claramente debajo de las pinturas mencionadas anteriormente. Otro elemento, producido tambi\u00e9n en la misma t\u00e9cnica negativa, representa una forma parecida a una pata de ave.<\/p>\n\n\n\n
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Paja Colorada, Panel . Foto mosaico: Robert Mark, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Paja Colorada, dos manos en t\u00e9cnica negativa. Foto: Roland F\u00e9lix, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Paja Colorada. Superposici\u00f3n de un motivo zoomorfo encima de imagen de mano.<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
En el Panel 3 de la pared oeste, se hallan ocho grabados que representan figuras zoomorfas vistas desde arriba, con las extremidades extendidas hacia los lados, incluyendo un motivo \u201ctripartito\u201d (con tres \u201cdedos\u201d en las extremidades), parecido a figuras pintadas o grabadas que existen en arte rupestre de la cuenca del r\u00edo Mizque y tambi\u00e9n como decoraci\u00f3n en cer\u00e1micas del per\u00edodo Intermedio Tard\u00edo (1000-1438 d.C.). Adem\u00e1s, encontramos en este conjunto el \u00fanico motivo adscrito al per\u00edodo Colonial o Republicano, una cruz cristiana dibujada en color negro.<\/p>\n\n\n\n
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Paja Colorada, Panel 3. Dibujo: Freddy Taboada, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/div>\n\n\n\n
En el piso se hallan cinco unidades c\u00f3ncavas artificiales (\u201cc\u00fapulas\u201d), se puede observar un tono rojizo en su interior, lo que podr\u00eda indicar que estas cavidades fueron utilizadas para mezclar pintura roja. Sin embargo, no podemos excluir que sirvieron tambi\u00e9n para otros fines.<\/p>\n\n\n\n
Esta cueva extraordinaria posee arte rupestre de diferentes per\u00edodos, seguramente ejecutadas en un lapso de miles de a\u00f1os. Al parecer, las improntas negativas de manos pertenecen a las representaciones m\u00e1s antiguas, posiblemente son del per\u00edodo Precer\u00e1mico, lo que habr\u00e1 que establecer en investigaciones especializadas del futuro. En la Patagonia argentina pinturas rupestres de manos en negativo ya fueron producidas hace m\u00e1s de 9.000 a\u00f1os y hasta el cuarto milenio antes de Cristo.<\/p>\n\n\n\n
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Secuencia de diferentes tradiciones pict\u00f3ricas en la cueva Paja Colorada, basada en superposiciones (Freddy Taboada).<\/figcaption><\/figure><\/div>\n\n\n\n
Proyecto del Parque Arqueol\u00f3gico de Paja Colorada<\/strong><\/p>\n\n\n\n
Este proyecto se realiz\u00f3 en los a\u00f1os 2006-2009, gracias al Convenio de cooperaci\u00f3n entre la SIARB y el Gobierno Aut\u00f3nomo Municipal de Moro Moro y el apoyo de las Embajadas del Reino de los Pa\u00edses Bajos y de Alemania, la Fundaci\u00f3n Cultural del Banco Central, la Bradshaw Foundation y la organizaci\u00f3n canadiense CESO. Entre las labores realizadas podemos destacar: la cueva Paja Colorada y sus alrededores fue declarada Patrimonio Cultural e Hist\u00f3rico Municipal (Ordenanza 17\/2007 del Consejo Municipal de Moro Moro), un plan de manejo inicial, documentaci\u00f3n e investigaci\u00f3n del arte rupestre, an\u00e1lisis de pigmentos de las pinturas, diagn\u00f3stico de conservaci\u00f3n y limpieza de grafitis, prospecci\u00f3n arqueol\u00f3gica, excavaci\u00f3n en la cueva, capacitaci\u00f3n de gu\u00edas locales, instalaci\u00f3n de una reja en la entrada de la cueva y de un piso de madera, se\u00f1alizaci\u00f3n con letreros, planificaci\u00f3n de un centro de atenci\u00f3n a turistas.<\/p>\n\n\n\n
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Letrero cerca del pueblo La Laja. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Letrero cerca de la cueva Paja Colorada. Foto: Matthias Strecker, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Paja Colorada. Comunarios de La Laja sobre el piso de madera instalada en la cueva. Foto: Pilar Lima, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n
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Samaipata, Santa Cruz<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
El sitio arqueol\u00f3gico de Samaipata ha sido investigado ya en los siglos XVIII y XIX por los cient\u00edficos Tadeo Haenke y Alcide d’Orbigny. Posteriormente Erland Nordenski\u00f6ld, Leo Pucher y Hermann Trimborn estudiaron la zona. En 1951 el gobierno boliviano declar\u00f3 la zona Monumento Nacional. En 1974, por iniciativa de Carlos Ponce S., se funda el Centro de Investigaciones Arqueol\u00f3gicas en Samaipata que cuenta con un museo importante. Se inician la limpieza del cerro esculpido y las primeras excavaciones.<\/p>\n\n\n\n
Desde 1992 se llev\u00f3 a cabo el Proyecto de Investigaciones Arqueol\u00f3gicas de Samaipata (P.I.A.S.) con un equipo internacional, dirigido por Albert Meyers (Universidad de Bonn), cuyas excavaciones pusieron al descubierto m\u00e1s de 50 edificaciones en una zona de 30-40 hect\u00e1reas.<\/p>\n\n\n\n
En 1998 la UNESCO declar\u00f3 al sitio Patrimonio Cultural de la Humanidad. Es considerado la mayor obra de \u201carquitectura rupestre\u201d del mundo.<\/p>\n\n\n\n
Los hallazgos han permitido reconocer el siguiente cuadro cronol\u00f3gico de los asentamientos en Samaipata: Fase pre-Inka, Inka I, Inka II (los dos per\u00edodos incaicos separados por una invasi\u00f3n de los chiriguanos), Colonia.<\/p>\n\n\n\n
El museo arqueol\u00f3gico de Samaipata presenta artefactos de diferentes tradiciones de los valles, aparte de la cultura Inka.<\/p>\n\n\n\n
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Cer\u00e1mica del estilo Mojocoya Temprano. Museo Arqueol\u00f3gico de Samaipata. Foto: Clovis C\u00e1rdenas, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Ar\u00edbalo Inka. Museo Arqueol\u00f3gico de Samaipata. Foto: Clovis C\u00e1rdenas, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
La tradici\u00f3n popular ha denominado a la zona como \u00abEl Fuerte\u00bb, lo que se remonta al uso de los Inka y los espa\u00f1oles. Sin embargo, las investigaciones han demostrado que ya exist\u00edan asentamientos preincaicos, las que continuaron hasta la Colonia. Se supone que los Inka erigieron all\u00ed un importante centro religioso y administrativo.<\/p>\n\n\n\n
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Plano del sitio arqueol\u00f3gico El Fuerte de Samaipata (PIAS)<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Este centro se caracteriza por una gran plaza bordeada de edificios importantes como la kallanka<\/em>: Se ubica en el peque\u00f1o valle al sur de la roca, separado de \u00e9sta por un sistema de terrazas. La kallanka <\/em>de Samaipata es un edificio de 68 m de largo y 16 m de ancho con 8 puertas. Las interpretaciones sobre su funci\u00f3n giran desde un uso como cuartel militar hasta otros para fines rituales o de ceremonias p\u00fablicas en general. En las dos plataformas elevadas al lado oeste de la gran plaza se encuentran una cantidad de edificios de proporciones medianas. En el mont\u00edculo m\u00e1s al oeste as\u00ed como en varios lugares al este de todo el complejo fueron excavadas varias construcciones interpretadas como las residencias del personal administrativo del centro incaico.<\/p>\n\n\n\n
Muchos visitantes del lugar han especulado sobre la finalidad de la chinkana<\/em>, un profundo hueco cavado en la roca m\u00e1s al sureste de la plaza. Una explicaci\u00f3n razonable podr\u00eda ser que se trataba de un pozo de agua para todo el complejo.<\/p>\n\n\n\n
El cerro esculpido<\/strong><\/p>\n\n\n\n
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Vista a\u00e9rea del cerro esculpido El Fuerte, Samaipata. Foto: Willy Kenning<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Este monumento \u00fanico en el mundo andino tiene una dimensi\u00f3n de aprox. 300 m, con 50 m de ancho, y est\u00e1 situada en direcci\u00f3n de este a oeste. Presenta una gran cantidad de elementos como depresiones artificiales, canales para libaciones (uso ritual) y de desag\u00fce, esculturas zoomorfas, nichos trapezoides y terrazas. La ilustraci\u00f3n (modelo tridimensional) da una impresi\u00f3n de estas obras escult\u00f3ricas que cubren toda la cima de la roca y sus lados.<\/p>\n\n\n\n
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Plano tridimensional del cerro esculpido El Fuerte, Samaipata (PIAS).<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Vista del cerro esculpido de Samaipata. Foto: Clovis C\u00e1rdenas, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Mencionamos aqu\u00ed solamente algunos pocos elementos notables. En la parte oeste se encuentran dos esculturas de felinos (pumas). Los primeros investigadores notaron a\u00fan m\u00e1s figuras en este lugar, incluyendo una serpiente enroscada y un \u00f1and\u00fa.<\/p>\n\n\n\n
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El fuerte<\/figcaption><\/figure><\/li>
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El fuerte<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
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Cerro esculpido de Samaipata, sector oeste con figura de felino. Foto: Clovis C\u00e1rdenas, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cerro esculpido de Samaipata, figura de felino. Foto: Clovis C\u00e1rdenas, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
M\u00e1s al este, sobre el lado inclinado de la roca, corre un sistema de canales y rombos en dos filas, que comunica con recipientes profundos y con un muro de nichos que traversa la roca. Este sistema de grabados ha sido comparado con piezas incaicas, l\u00edticas o de madera, con un recipiente globular y canales en forma de rombos (pacha<\/em>), supuestamente usadas en ritos incaicos. <\/p>\n\n\n\n
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Cerro esculpido de Samaipata, canal y cadena de rombos grabados. Foto: Archivo SIARB. (Esta foto fue tomada en los a\u00f1os 1980, cuando los visitantes pod\u00edan acercarse a los grabados e inclusive pisaban la roca esculpida, pr\u00e1ctica que actualmente est\u00e1 prohibida.)<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cerro esculpido de Samaipata, detalle de la cadena de rombos grabados. Foto: Archivo SIARB.<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
En el punto m\u00e1s alto de la cima se halla un gran c\u00edrculo cavado en la roca que Leo Pucher llam\u00f3 \u00abCoro de los Sacerdotes\u00bb. El borde del c\u00edrculo contiene 18 rebajas a modo de asientos. En el centro existen 9 asientos intercalados por 9 peque\u00f1as hornacinas. No se conoce la finalidad de esta estructura especial.<\/p>\n\n\n\n
Respecto a los grandes nichos tallados en la roca, Meyers sugiere que en ellas estaban expuestas las momias estatuas de los dioses de los Inka para que se les rinda culto. Formar\u00edan parte de una especie de templos cerrados o abiertos, cuyos restos de muros de piedra se pueden apreciar todav\u00eda en algunas partes.<\/p>\n\n\n\n
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Cerro esculpido de Samaipata, nichos. Foto: Rainer Hostnig, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cerro esculpido de Samaipata, filas de peque\u00f1os nichos decorativos. Foto: Rainer Hostnig, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Adem\u00e1s, encontramos en la superficie de la roca depresiones y canales de desag\u00fce.<\/p>\n\n\n\n
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Cerro esculpido de Samaipata, grandes depresiones para almacenar agua. Foto: Archivo SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Dos muros cruzan el cerro esculpido, uno tiene la forma de una L con nichos en los dos lados. Es uno de los indicios m\u00e1s claros que hab\u00eda diferentes fases de utilizaci\u00f3n del cerro y distintos conceptos, ya que est\u00e1 puesto encima de otros grabados.<\/p>\n\n\n\n
La protecci\u00f3n y conservaci\u00f3n<\/strong> de este monumento es dif\u00edcil considerando la fragilidad de la roca arenisca. Una evaluaci\u00f3n cr\u00edtica de posibles tratamientos de la roca esculpida se public\u00f3 en el Bolet\u00edn N\u00ba 14 (2000) de la SIARB. En el pasado, los visitantes pisaron las esculturas y contribuyeron a su destrucci\u00f3n, raz\u00f3n por la cual se ha delimitado el recorrido de los turistas a una pasarela que bordea la roca. Desde el mirador al oeste, se tiene una vista excelente del sitio.<\/p>\n\n\n\n
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Cerro esculpido de Samaipata, pasarela para visitantes. Foto: Rainer Hostnig, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n
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Juan Miserandino, Santa Cruz<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
En 2004 la SIARB realiz\u00f3 un proyecto de registro, documentaci\u00f3n y diagn\u00f3stico de conservaci\u00f3n de sitios de arte rupestre en la Chiquitan\u00eda, financiado por la Fundaci\u00f3n de Conservaci\u00f3n del Bosque Chiquitano (FCBC). Publicamos algunos resultados en nuestro Bolet\u00edn 21 (2007). Uno de los sitios m\u00e1s importantes es la cueva de Juan Miserandino que se destaca por sus representaciones singulares, es objeto de frecuentes visitas sin control, con la consecuencia que existe un alto grado de actos vand\u00e1licos.<\/p>\n\n\n\n
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Entrada a la cueva Juan Miserandino. Foto: Roland F\u00e9lix, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Las pinturas presentan escenas de hombres, animales y plantas de un estilo naturalista, aparte de representaciones abstractas.<\/p>\n\n\n\n
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Cueva Juan Miserandino. Pinturas antiguas e inscripciones de vandalismo. Foto: Roland F\u00e9lix, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cueva Juan Miserandino. Pintura de un hombre con un largo palo, al parecer tratando de sacar algo de una planta. Foto: Roland F\u00e9lix, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Pinturas de la cueva Juan Miserandino. Dibujo: Ren\u00e1n Cordero, SIARB.<\/figcaption><\/figure><\/li>
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Cueva Juan Miserandino, composiciones abstractas. Foto: Roland F\u00e9lix, SIARB<\/figcaption><\/figure><\/li><\/ul>\n\n\n\n
Para el a\u00f1o 2006 presentamos a la Prefectura de Santa Cruz, DIREMA y la Uni\u00f3n Europea un nuevo proyecto, despu\u00e9s de haber sido invitados directamente. Sin embargo, los financiadores insist\u00edan en la construcci\u00f3n de infraestructura y no dieron importancia a condiciones imprescindibles para el funcionamiento de un parque arqueol\u00f3gico seg\u00fan nuestros criterios: un plan integral para la preservaci\u00f3n y el aprovechamiento racional para el turismo (plan de manejo), campa\u00f1as educativas, capacitaci\u00f3n de gu\u00edas, medidas de conservaci\u00f3n y la administraci\u00f3n del sitio a cargo de la poblaci\u00f3n local. De esta manera rechazaron nuestra oferta y encargaron a un arquitecto la construcci\u00f3n de infraestructura: un letrero delante de la cueva, una especie de cerco de madera con puerta de ingreso, no cerrada, adem\u00e1s dentro de la cueva un sendero empedrado con cemento (que impide excavaciones arqueol\u00f3gicas), postes y soga a cierta distancia a los paneles de pinturas.<\/p>\n\n\n\n
Esperamos que en el futuro sea posible continuar el trabajo para lograr una protecci\u00f3n y administraci\u00f3n eficiente del sitio con la participaci\u00f3n de gu\u00edas localesw.<\/p>\n\n\n\n
Motacusito, Santa Cruz<\/strong><\/h5>\n\n\n\n
El sitio de Motacusito, en la regi\u00f3n adyacente a la laguna Concepci\u00f3n (San Jos\u00e9 de Chiquitos, Santa Cruz) ha sido investigado a partir del a\u00f1o 1979 por Carlos Kaifler, Erica Pia (1987) y otros. Quisi\u00e9ramos destacar las recomendaciones de Pilar Lima (2008), quien sugiri\u00f3 establecer un programa cient\u00edfico de conservaci\u00f3n de sitios arqueol\u00f3gicos y de arte rupestre; asimismo se recomend\u00f3 establecer alianzas estrat\u00e9gicas para lograr una adecuada gesti\u00f3n del patrimonio cultural, considerando instituciones que est\u00e9n encargadas de la conservaci\u00f3n e investigaci\u00f3n arqueol\u00f3gica. Sin embargo, a pesar de estos antecedentes de investigaci\u00f3n e intervenci\u00f3n, todav\u00eda no existe un informe con una documentaci\u00f3n completa de las pinturas de este importante sitio.<\/p>\n\n\n\n
La parte central consiste en un alero de piedra caliza de unos 15 m de largo y 2 m de alto, donde se destacan pinturas en color rojo de figuras abstractas, representaciones antropomorfas y zoomorfas estilizadas.<\/p>\n\n\n\n
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Pinturas del alero Motacusito. Foto: Alex Zanesco<\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
En abril del a\u00f1o 2013 Carlos Kaifler inspeccion\u00f3 el sitio nuevamente y constat\u00f3 la construcci\u00f3n de una infraestructura implementada por la Direcci\u00f3n de \u00c1reas Protegidas de la Gobernaci\u00f3n del Depto. de Santa Cruz. Lamentablemente, esta obra en vez de lograr la protecci\u00f3n del sitio ha producido efectos negativos para su conservaci\u00f3n. La misma consiste en la construcci\u00f3n grande de un techo (17 m de largo y 7,30 m de ancho) encima del alero, el cual invita a los visitantes a sentarse dentro y hacer un picnic y otras actividades de recreaci\u00f3n, las que pueden causar m\u00e1s da\u00f1o al sitio. Para colocar el techo de DURALIT se perfor\u00f3 la roca del alero cinco veces, lo que significa un da\u00f1o considerable al sitio patrimonial.<\/p>\n\n\n\n
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Los constructores hicieron una fogata en el mismo alero; la consecuencia es que a lo largo de varios metros la pared con las pinturas qued\u00f3 ennegrecida, adem\u00e1s el excesivo calor calent\u00f3 la superficie rocosa, hasta producir una exfoliaci\u00f3n en varios puntos de la zona afectada. Para terminar, los constructores dejaron restos de materiales de construcci\u00f3n y ropa de trabajo en el lugar.<\/p>\n\n\n\n
Parece ir\u00f3nico que delante del alero se coloc\u00f3 un letrero que dice: \u201cValoremos la cultura de nuestros antepasados. No destruyes las pinturas rupestres.\u201d<\/p>\n\n\n\n
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Letrero en el sitio Motacusito. Foto: Carlos Kaifler, SIARB<\/figcaption><\/figure>\n\n\n\n
Lamentamos que esta iniciativa se realiz\u00f3 sin participaci\u00f3n de expertos en registro y conservaci\u00f3n del arte rupestre, a pesar de nuestras recomendaciones al arquitecto responsable de la obra de que no toque la roca, sin plan de la administraci\u00f3n del sitio y sin participaci\u00f3n de pobladores de la comunidad cercana, quienes se interesan en la preservaci\u00f3n de su patrimonio cultural.<\/p>\n\n\n\n
Esperamos que en el futuro se pueda retomar el proyecto del parque arqueol\u00f3gico de Motacusito en colaboraci\u00f3n entre la Gobernaci\u00f3n de Santa Cruz, los pobladores de la regi\u00f3n y expertos en arte rupestre, conservaci\u00f3n, administraci\u00f3n y puesta en valor de sitios arqueol\u00f3gicos.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"
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